Entre los días 18 y 28 de junio ha tenido lugar una nueva edición de la Cuatrienal de Praga (la PQ), el evento internacional de escenografía y plástica teatral más importante del mundo, en el que se dan cita profesionales, artistas, académicos y estudiantes de todas partes.

Las cifras, según los organizadores, han sido: mil artistas, 78 países, 11 días, 600 eventos, en palacios, galerías, plazas y solares del centro de Praga. Las actividades, variadas: exposiciones, performances, talleres, encuentros, charlas, laboratorios, etc.

Ha destacado la presencia de grandes directoras como Julie Taymor, Robert Lepage o Bob Wilson, pero también de las profesoras de teatro político Sophie Nield y Olivia Gagnon o el artivista John Jordan (Reclaim the streets), entre otras.

Este año, la temática de toda la PQ era 'Música, Clima y Política', y se valoraba más la investigación, los procesos de colaboración y la relación con el contexto social, que la escenografía tradicional.

El concepto artístico era 'La escenografía como espacio-compartido', y se inspiraba, como escribe Sodja Lotker, directora artística de la PQ, "en los acontecimientos mundiales de los últimos años", en concreto, en "las reuniones multitudinarias de personas que se conectan para expresar sus deseos y necesidades. Estas reuniones han demostrado el poder del encuentro, así como la necesidad de la gente de usar la teatralidad como su forma de expresión".

Por lo tanto, sigue diciendo, "es hora de repensar el teatro como el último lugar humano". Con estas premisas, la consigna, tanto para la sección de países y regiones como para la sección de escuelas, era presentar instalaciones interactivas más que fotos y maquetas, aunque muchos no lo hayan entendido.

Los organizadores, consecuentemente, han premiado las propuestas más políticas, arriesgadas y alejadas de los planteamientos tradicionales.

La gran ganadora ha sido Estonia, que ha presentado la propuesta de la compañía NO99, titulada Estonia Unida, un proyecto de guerrilla electoral. En 2010 esta compañía creó un movimiento político falso cuyo objetivo era exponer cómo se hace la política, así como animar a la gente a hablar con el fin de evitar ser manipulado.

"Si no haces política, la política te hace", decían. El proyecto culminó con una convención del partido para 7.500 espectadores. El espectáculo se burlaba del populismo y el nacionalismo en sus peores formas. Al cabo de dos meses, la intención de voto para este partido falso era del 25%.

En cuanto a la participación española, el comisario general de España (excepto Cataluña, que se presentaba separadamente) ha sido José Luis Raymond, escenógrafo, director de escena, artista plástico y profesor de escenografía de la RESAD. Raymond ha diseñado también el estand de España, uno de los que más éxito ha tenido, aunque no haya resultado premiado.

Un panteón dorado con un catafalco en medio sobre una urna de deshechos. El modo de interacción con el espacio, por parte del público, consistía en tumbarse sobre el dispositivo. Mientras escuchaba un texto relativo a la putrefacción, podía verse en un espejo en el techo siendo comido por gusanos proyectados sobre su cuerpo. Un visitante que había sufrido dos infartos y la pérdida reciente de un hijo pidió hacerlo desnudo.

Para Raymond, la instalación, cuyo título era Muérete, aunque se inspira en la tradición barroca, es una metáfora de la situación de cambio colectivo y transformación social que el Estado español está viviendo en estos momentos. Según él, es necesario que muera una parte de cada uno, en concreto aquella que representa los viejos valores, para que una nueva sociedad pueda vivir. "La evolución social es un proceso imparable y quien no asuma esta realidad está muerto como ciudadano", dice Raymond.

Otras de las propuestas españolas iban también por este camino, como De profundis, de los sevillanos Ángela Guerrero y Manuel Cid, y Borrón y cuenta vieja, de los directores Amelia Díe, Vero Clausich y Raúl Polar. Creada a partir de un trabajo de investigación llevado a cabo durante el curso 2013-14 en la RESAD sobre las fosas de la represión franquista, se trata de una performance sobre los discursos de la Historia, el oficial y el de las víctimas. Fue una de las performances más concurridas de la PQ y sin duda la más emotiva.

El estand de escuelas, comisariado por la escenógrafa y profesora de espacio escénico de la RESAD Alicia Blas, tenía más que ver con los valores de la nueva colectividad que está surgiendo desde el 15M.

A través del espejo es una instalación diseñada y construida colaborativamente y de manera horizontal por los alumnos de las cuatro escuelas que imparten escenografía en el estado (excepto Cataluña, que participaba individualmente): Vigo, Córdoba, Sevilla y Madrid.

Creada con materiales reciclables, se trata de un espacio lúdico e interactivo en el que crece un huerto urbano y pequeñas miniaturas muestran posibles medios de interacción, de la siesta a la protesta, que el público puede desarrollar sobre los distintos espacios que conforman la instalación.